Los hombres deberían saber que del cerebro, y nada más que del cerebro,
vienenlas alegrías, el placer, la risa y la diversión, las penas, el dolor, el
abatimiento y laslamentaciones.
Y gracias al cerebro, de manera especial, adquirimos sabiduría y conocimientos,
y vemos, oímos y sabemos lo que es repugnante y lo que es bello, lo que es malo
y lo que es bueno, lo que es dulce y lo que es insípido...
Y gracias a este órgano nos volvemos locos y deliramos, y los miedos y terrores
nos asaltan...
Debemos soportar todo esto cuando el cerebro no está sano...
Y en este sentido soy de la opinión de que esta víscera ejerce en el ser
humano el mayor poder.
Hipócrates, Sobre las enfermedades sagradas (460-470 a.C.)
Discute acerca de la importancia del cerebro y como fue cambiando la concepción sobre el mismo a lo largo de la historia.